Te escribimos estas líneas para comunicarte personalmente, aunque hayas recibido correo de la persona principal, una importante decisión de la Junta de Gobierno, que afecta al presente y al futuro de la cuadrilla de costaleras de nuestra Hermandad, de la que formas parte.
Esta decisión, posiblemente es la más difícil que ha tenido que tomar esta Junta en sus casi tres años de mandato, es la sustitución al frente de la cuadrilla de nuestro actual capataz D. Antonio Navarro Trujillo, trás su dimisión, para nosotros algo precipitada.
Esta decisión, posiblemente es la más difícil que ha tenido que tomar esta Junta en sus casi tres años de mandato, es la sustitución al frente de la cuadrilla de nuestro actual capataz D. Antonio Navarro Trujillo, trás su dimisión, para nosotros algo precipitada.
Entenderás que una decisión así no se adopta, ni mucho menos, por gusto. Como decíamos, ha sido una de las más difíciles que esta Junta de Gobierno ha tenido que afrontar. Y lo ha sido porque entran en juego desde cuestiones como la tradición, o las normas no escritas, hasta el cariño personal que sentimos por este hermano. Pero frente a todo eso, trás una breve reunión con él, no hemos tenido otro camino, que respetar su decisión y buscar una solución lo más rápida posible, pues no debemos olvidar, la ineludible obligación que tenemos quienes dirigimos la Hermandad de mirar por los intereses de nuestra Cofradía.
En este sentido, y aunque sería nuestra obligación informarte al detalle de las motivaciones de este cambio, que nadie espere encontrar en esta carta una sola crítica a nuestro hasta ahora capataz. Tan solo hay palabras de agradecimiento, porque a lo largo de todo este año ha dado lo mejor de sí mismo, porque muchos de los actuales problemas de la cuadrilla les han venido heredados de épocas anteriores y porque no ha tenido en otras ocasiones todo el apoyo que ha necesitado de sus camaradas, defendiendo a la mujer costalera.
Lo reiteramos, y en voz alta para que quede bien claro, para Antonio Navarro Trujillo, y el resto de integrantes del equipo de capataces, sólo gratitud, cariño, y la seguridad de que ésta, antes y después de tomar su decisión, es su Casa, así con mayúsculas.
Lo reiteramos, y en voz alta para que quede bien claro, para Antonio Navarro Trujillo, y el resto de integrantes del equipo de capataces, sólo gratitud, cariño, y la seguridad de que ésta, antes y después de tomar su decisión, es su Casa, así con mayúsculas.
Tenemos todo el derecho del mundo a ambicionar para el futuro de nuestra cuadrilla una mayor cohesión de sus responsables entre sí y, en general, de todas sus integrantes. Junto a ello, y aunque no pretendemos que suene duro pero sí realista, creemos necesario un mayor grado de disciplina en la cuadrilla, que no esté enturbiada por una relación personal que en muchas ocasiones ha interferido en la aplicación del concepto de autoridad. Seguro que todo ello redundará, sustancialmente, en el resultado del trabajo de la cuadrilla, y en la relación personal de quienes la forman.
Sabemos que una decisión así podrá encontrar respaldos, pero también contestación. A aquellos hermanos o hermanas que legítimamente no la compartan, que crean que es mejor continuar con el actual equipo de capataces, o que por el contrario opinen que debe incorporarse a otro capataz que sea hermano, a ellos les decimos que después de mucho meditarlo, trás este momento tan agrio, hemos llegado al convencimiento de que ninguna de esas dos posturas solucionaría los problemas que afectan a la cuadrilla. Por otro lado, somos también conscientes de que este cambio será utilizado por quienes pretendan hacer de él un arma de desgaste contra quienes actualmente dirigimos la Hermandad. A estos, solo aprovecho la ocasión para decirles, que a esta Junta de Gobierno se le pondrán las cosas difíciles, pero seguiremos trabajando con la misma ilusión que el primer día, aceptando incluso una decisión tan difícil como esta, aunque vaya contra nuestro propio interés, si con ella conseguimos lo mejor para la Hdad.
Querida hermana costalera, esperamos haberte informado adecuadamente de lo acontecido, y que hayas comprendido ambos motivos. No obstante, para esta o cualquier otra cuestión que necesites, ya sabes donde tienes a tu Hermano Mayor.
Un fuerte abrazo.
Agradecimiento a D. Antonio Navarro Trujillo
La Hdad de la Coronación de Espinas, y en concreto la Junta de Gobierno, quiere expresar su más sincero agradecimiento a D. Antonio Navarro, hasta ahora capataz del Paso de Palio de Sta. María del Perdón, por su trabajo con y para la Hermandad durante el año que ha dirigido a la cuadrilla de mujeres costaleras. Siendo para todos nosotros, un momento tan agrio el comunicar, su dimisión en dicho puesto, por motivos que le impiden poder continuar realizando su trabajo de la manera que hasta ahora, lo estaba haciendo.
Hemos vivido momentos intensos e inolvidables con Antonio, de los que todos hemos sido participes. No olvidamos nuestros arranques, primeros ensayos, las ilusiones de las nuevas costaleras, las esperanzas de las más antiguas, la lluvia del traslado, y ese Domingo de Ramos que llenamos de fe, a todos los que acompañaron a nuestros Titulares, por las calles de Ciudad Real.
Comidas, cenas, confidencias con Antonio, todo lo que nos quedamos de el, pues lo más importante es que nuestra amistad y su familia, la Coronación, eso no lo pierde.
D. Antonio Navarro, se lleva nuestro reconocimiento a su trabajo y el gran cariño de todos los hermanos de esta Cofradía, siendo así, siempre bienvenido.
Sin más, recibid todos un cordial saludo, en Cristo Coronado de Espinas y Santa María del Perdón.